En la República Dominicana, es imperativo avanzar hacia un Estado más eficiente y austero que pueda satisfacer las crecientes demandas de la sociedad. Un aparato estatal funcional y integral es esencial para garantizar el bienestar y el progreso de todos los ciudadanos. Sin embargo, este cambio debe ser cuidadosamente planificado y ejecutado para no sobrecargar a los contribuyentes y permitir un desarrollo sostenible a largo plazo.
Un Estado Dominicano más eficiente se traduce en una administración pública ágil y transparente, capaz de responder de manera efectiva a las necesidades de la población. La optimización de los recursos y la eliminación de la burocracia innecesaria son pasos fundamentales para lograr este objetivo. Al mejorar la gestión de los servicios públicos, se fortalece la confianza de los ciudadanos en las instituciones y se fomenta una mayor participación cívica y democrática.
Además, la planificación integral del Estado es crucial para garantizar un desarrollo equitativo y sostenible en todos los sectores de la sociedad dominicana. La coordinación entre las diferentes instancias gubernamentales, así como la incorporación de la sociedad civil y el sector privado en la toma de decisiones, son aspectos esenciales para construir un Estado proactivo y orientado al bien común. Solo a través de un enfoque integral y colaborativo se podrán suplir las necesidades de la sociedad de manera efectiva, sin generar una carga fiscal excesiva para los contribuyentes.
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