Descubre la inspiradora historia de Ashley Flores, una joven emprendedora dominicana que ha transformado su pasión por los negocios en exitosos proyectos como Krunchy Cueritos y Típico 56 en Nueva York.

Ashley Flores, una joven dominicana nacida en los Estados Unidos pero criada en Santo Domingo, es un ejemplo inspirador de espíritu emprendedor. A pesar de no tener planes de regresar a los Estados Unidos, la enfermedad de su padre la llevó a mudarse definitivamente en 2018. Con su energía emprendedora y su pasión por los negocios, Ashley no solo enfrentó este cambio de vida, sino que lo convirtió en una oportunidad para expandir su trayectoria empresarial.

En la República Dominicana, mientras aún estudiaba arquitectura, Ashley comenzó su camino empresarial a los 18 años, lanzando varios negocios. Sin embargo, tras mudarse a los Estados Unidos, decidió emprender de nuevo. Así nació Krunchy Cueritos, un negocio que ha gozado de gran éxito gracias a su enfoque en la comida tradicional dominicana, especialmente en la preparación de chicharrones, un platillo que está profundamente enraizado en la herencia familiar de Ashley.

Recientemente, Ashley ha lanzado Típico 56, un restaurante en Nueva York que rinde homenaje a sus raíces dominicanas y lleva el nombre de la serie 56, en referencia a su pueblo natal, San Francisco de Macorís. Este restaurante es una celebración de la cultura dominicana, no solo a través de su exquisita comida casera, sino también por su ambiente acogedor, creado con detalles artesanales en madera y un diseño que Ashley y su esposo elaboraron juntos.

Lo que distingue a Ashley no es solo su capacidad para crear negocios exitosos, sino también su tenacidad y enfoque en superar los desafíos. Desde enfrentar las dificultades que conlleva abrir un negocio en un país extranjero hasta lidiar con la burocracia y las adversidades financieras, Ashley ha demostrado que con esfuerzo, resiliencia y un fuerte apoyo familiar, todo es posible. Ella misma reconoce que este proceso no ha sido fácil, señalando que «detrás de cada negocio exitoso hay mucho llanto, sufrimiento y deuda». Sin embargo, su fe y su determinación la han llevado a prosperar.

Ashley es un claro ejemplo de cómo los dominicanos en el exterior continúan aportando a su cultura y comunidad, llevando consigo la esencia de su país natal dondequiera que vayan. Como ella misma afirma, «el que la hace en Nueva York, la hace donde sea», subrayando que todo es posible si se enfrenta con pasión y dedicación.

Típico 56, su más reciente emprendimiento, se ha convertido en un punto de referencia para la comunidad dominicana en Nueva York, donde los clientes pueden disfrutar de un auténtico sazón dominicano en un ambiente que les recuerda a casa.