Luego de una tímida pausa de al menos unos tres meses, las deportaciones de nacionales haitianos desde diferentes países han vuelto a reanudarse.

En el caso de los Estados Unidos, el gobierno del presidente Joe Biden, envió su primer vuelo, luego de tres meses de una relativa pausa. En este primer envío, unos 52 haitianos en condicion migratoria irregular, fueron devueltos a su país.

El Departamento de Seguridad Nacional informó en un comunicado que “seguirá implementando las leyes y políticas de Estados Unidos a lo largo del estrecho de Florida y de la región del Caribe, así como en la frontera suroeste. La política de Estados Unidos es devolver a los no ciudadanos que no establezcan una base legal para permanecer en Estados Unidos”. Las autoridades se limitaron solo a informar la cantidad de los deportados que iban a bordo.

El un avión despegó de Alexandria, Luisiana, un centro de operaciones de deportación, y aterrizó en Cabo Haitiano, Haití, tras una escala en Miami. Según los datos ofrecidos por Thomas Cartwright, de Witness at the Border, un grupo activista que monitorea los datos de los vuelos.

Marjorie Dorsaninvil, una ciudadana estadounidense, dijo que entre los deportados hacia Haití, estaba Gerson Joseph, su prometido haitiano, el cual la llamó llorando desde el aeropuerto de Miami el jueves por la mañana para decirle que había sido deportado en un vuelo con destino a Cabo Haitiano junto a otros haitianos y más personas de otros países, incluidas las Bahamas.

Gerson Joseph ya había vivido en los Estados Unidos durante más de 20 años y tiene una hija de 7 años que cuenta con ciudadanía estadounidense con otra mujer.

Sobre Joseph pesaba ya una orden de deportación desde el año 2005, tras perder una solicitud de asilo que su abogado, Philip Issa, dijo que había sido resultado de una mala representación legal en aquel momento. La orden no había sido ejecutadaAunque Joseph no había sido deportado anteriormente, su abogado pretendía que se anulara esa orden.

Además, El ciudadano haitiano, Gerson Joseph había sido declarado culpable de robo y allanamiento, y le ordenaron pagar una indemnización de 270 dólares, de acuerdo con su abogado, había estado detenido desde el año pasado.

Dorsaninvil dijo que su prometido no tiene a “nadie” en Haití. “Es devastador para mí. Estábamos planeando una boda y ahora se ha ido”, señaló.

Gobierno de Las Bahamas repatría a otro 274 haitianos

Por su parte, el Gobierno de las Bahamas repatrió a Cabo Haitiano, Haití, a 274 ciudadanos haitianos que habían sido interceptados en el mar en su propósito de ingresar ilegalmente a ese territorio caribeño.

El hecho ocurrió el lunes 15 de abril, según reportó Radio RFM en su cuenta de la red social X.

«Las Bahamas repatriaron el lunes a Cabo Haitiano a 274 nacionales haitianos que habían sido interceptados en el mar. Los inmigrantes haitianos fueron devueltos a Haití a bordo de un barco de las fuerzas de defensa de las Bahamas«, indicó el medio haitiano.

Tras el estallido de la crisis política y de violencia descomunal en Haití, producto del apogeo de las bandas armadas, desde finales del mes de febrero, la migración de haitianos hacia otros países ha aumentado significativamente.

La semana pasada, el 8 de abril, la Guardia Costera de Defensa de Bahamas detuvo una embarcación ilegal en Inagua, en el sur del archipiélago atlántico, en donde viajaban 257 migrantes, de los cuales 218 eran hombres y 39 mujeres.

Islas Turcos y Caicos.

 

En las Islas Turcos y Caicos las autoridades locales arrestaron a 30 migrantes (20 hombres y diez mujeres), a su vez incautaron a seis perros guardados en perreras. Uno de los canes estaba muerto.

El comisionado asistente de la Policía de las Islas Turcos y Caicos, Mat Newton, detalló que la nave de alta velocidad y sus motores fueron robados de su dueño en Providenciales.

Los migrantes fueron interceptados por oficiales del Departamento Ambiental y Recursos Costeros y apoyados por el Regimiento de Inmigración de las Islas Turcos y Caicos.

Los agentes marítimos también respondieron a la alerta y asistieron con remolcar la embarcación a la orilla, donde los ocupantes fueron entregados a las autoridades migratorias para su debido proceso de deportación.

Newton contó además que las autoridades recibieron una alerta de parte de las fuerzas de seguridad de Estados Unidos sobre una embarcación cerca de Inaugua y de la costa suroeste de Caicos.

Ante ello, Newton dio la alerta a varias agencias, las cuales se movilizaron y lograron capturar al segundo grupo de 30 migrantes.

«Estos migrantes son trasladados en embarcaciones robadas junto con algunos animales. El combatir este intercambio ilícito requiere vigilancia y cooperación de todas las agencias de seguridad y la ciudadanía», explicó.

 

República Dominicana

En el caso de la República Dominicana, país que ha tenido que enfrentar la mayor presión migratoria por parte de Haití, debido a que ambos países comparten la Isla de la Hispaniola, y en donde existe una evidente diferencia en los niveles de crecimiento económico en los últimos 70 años, además de niveles de seguridad, igualmente disparejos, no ha detenido las deportaciones de ciudadanos haitianos en condición de ilegalidad.

La República Dominicana, con una economía en franco crecimiento, pero a su vez debe enfrentar los desafíos de su propia población de menos de 11 millones de habitantes, según el último censo del 2023, ha experimentado niveles de sobrepoblación haitiana a niveles nunca antes visto.

El Estado dominicano, en varios renglones ha cedido a la presión de organismos internacionales, y ha sido flexible con esta población, en donde en los últimos estudios arrojan una alta participación de extranjeros haitianos, la gran mayoría indocumentada.

Sectores como la agricultura, la construcción y el propio turismo son solo algunos de ellos. En el área de la salud, el gobierno dominicano destinó unos 41,000 millones de pesos, más del 30% de los fondos de ese sector en el año 2023, según dijo El viceministro de Garantía de Calidad de los Servicios, José Antonio Matos.

“Estamos aportando entre el 26 y el 30% del presupuesto de Salud en las parturientas haitianas y enfermedades de extranjeros”, destacó el viceministro.

Otro de los sectores impactados, es de la educación pública, donde la ocupación en varios centros educativos es de alrededor del 70%, según un reportaje publicado recientemente en el programa Desclasificados con Addis Burgos, de la cadena de noticias CDN.

 

El Gobierno dominicano continuará con las deportaciones de haitianos y no permitirá un campo de refugiados, a pesar de la petición de la ONU ante la crisis humanitaria que vive el vecino país, aseguró el presidente Luis Abinader durante una entrevista con el programa de la BBC HARDtalk.

La ONU pidió a la República Dominicana y al resto de países detener las deportaciones de haitianos «hacia un país que claramente no es seguro», solicitud que fue reiterada por la Agencia de la ONU para los Refugiados (Acnur), que abogó por una protección de refugiados y no ser devueltos a Haití.

Más de 33.000 personas huyeron de Puerto Principe, capital de Haití en un período de menos de dos semanas cuando las pandillas comenzaron a saquear las viviendas y a atacar las instituciones estatales, de acuerdo con un reporte publicado el mes pasado de la Organización Internacional para las Migraciones OIM.

La mayoría de esas personas desplazadas viajaron al sur de Haití, que generalmente es pacífico en comparación con Puerto Príncipe, que tiene una población estimada de 3 millones de habitantes y se encuentra en gran parte paralizada por la violencia de pandillas.

La Policía Nacional de Haití (PNH), ha dicho en reiteradas ocasiones, que no cuenta con el personal suficiente y se ha visto abrumada por las pandillas, las cuales cuentan con poderosos arsenales. Muchos hospitales suspendieron las operaciones en medio de una escasez de suministros médicos.

Agentes de la Patrulla fronteriza de los EE.UU a caballo, tratando de detener la entrada de inmigrantes haitianos a través del Rio Grande. Sep. 19, 2021. (Foto PAUL RATJE / AFP)

 

Witness at the Border, señaló que los vuelos de deportación desde los Estados Unidos, eran frecuentes luego de que un campamento de 16.000 migrantes, la mayoría de ellos haitianos, se congregó en las riberas de los ríos en Texas en septiembre de 2021, pero se volvieron inusuales a medida que menos haitianos cruzaban ilegalmente la frontera hacia Estados Unidos.

Hubo 286 arrestos de haitianos tras cruzar la frontera sur de Estados Unidos durante los primeros tres meses del año, menos del 0,1% de los más de 400.000 arrestos entre todas las nacionalidades.

Más de 150.000 personas han ingresado a Estados Unidos de manera legal desde enero de 2023 en virtud de poderes presidenciales para permitir la entrada por cuestiones humanitarias, y muchos otros llegaron legalmente utilizando un sistema de citas por internet en los cruces terrestres con México llamado CBP One.

El Departamento de Seguridad Nacional dijo el jueves que estaba “monitoreando la situación” en Haití. La Guardia Costera repatrió a 65 haitianos que fueron detenidos en el mar frente a la costa de las Bahamas el mes pasado.

Haitian Bridge Alliance, un grupo defensor de migrantes, pidió que se suspendieran los vuelos de deportación hacia Haití, y señaló el jueves que Estados Unidos estaba “condenando a sabiendas a los más vulnerables, que acudieron a nosotros en su momento de necesidad, a un peligro inminente”.