Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) anunciaron hoy el exitoso asesinato de Ali Shadmani, el recién nombrado Jefe del Estado Mayor de las fuerzas armadas de Irán y uno de los comandantes militares de mayor rango del régimen.

Shadmani murió durante un ataque aéreo de precisión durante la noche contra un cuartel general tripulado ubicado en el centro de Teherán.

El ataque se llevó a cabo después de que la División de Inteligencia de las Fuerzas de Defensa de Israel recibiera información procesable, lo que proporcionó una oportunidad única de atacar a una de las figuras de más alto rango en la jerarquía militar iraní.

Ali Shadmani asumió el cargo de Jefe de Estado Mayor y Comandante del Comando de Emergencia de las Fuerzas Armadas a principios de este mes, tras el fallecimiento de su predecesor, Alam Ali Rashid, quien fue eliminado en la primera oleada de ataques conocida como Operación «Am Kalavi». Bajo el liderazgo de Shadmani, el Comando de Emergencia «Khatem Al-Anbiya» era responsable de gestionar las operaciones de combate y aprobar los planes de fuego dirigidos contra el Estado de Israel.

Antes de su ascenso, Shadmani se desempeñó como subcomandante del Comando de Emergencia y dirigió el Departamento de Operaciones del Estado Mayor de Irán. A lo largo de su carrera militar, desempeñó un papel fundamental en la coordinación de lanzamientos de misiles, ataques con drones y otras operaciones hostiles contra objetivos israelíes.

El asesinato selectivo de Shadmani supone otro golpe crítico para la estructura de mando militar de Irán en medio de las hostilidades en curso y tras una serie de asesinatos recientes destinados a desmantelar las altas esferas de las fuerzas armadas iraníes. Funcionarios israelíes han descrito la operación como parte de una estrategia más amplia para obstaculizar la capacidad de Irán de lanzar ataques coordinados en la región.