La preocupación de las autoridades guatemaltecas se centra en el avance de los incendios forestales y de un botadero de basura.

El presidente de Guatemala, Bernardo Arévalo, decretó este miércoles estado de calamidad por 30 días en todo el país por los incendios en bosques y en un vertedero de basura que amenazan la salud de los habitantes de la capital y sus alrededores.

«El Estado de calamidad tiene el propósito de enfrentar los incendios de una manera más ágil», afirmó el mandatario, tras precisar que la decisión fue tomada en consejo de ministros.

El gobernante socialdemócrata explicó que la medida busca fortalecer «con insumos materiales a las brigadas que combaten los incendios a través de la compra de equipo de protección personal y herramientas».

Según la estatal Coordinadora para la Reducción de Desastres (Conred), desde noviembre se han registrado 1.384 incendios, principalmente forestales, en todo el territorio que han arrasado 7,344 hectáreas.

El gobernante lamentó que el 80 % de los incendios han sido provocados por personas, como sucedió en el vertedero de Villa Nueva, al sur de la capital, donde 33 municipalidades depositan unas 126,000 toneladas de desechos cada mes, según las autoridades.

«Como Gobierno rechazamos estos actos que ponen en peligro la vida de los guatemaltecos, debido a que la alta contaminación y las partículas generadas por la combustión tienen efectos adversos en la salud», aseveró el mandatario.

El siniestro en el vertedero comenzó el fin de semana y llevó a las autoridades a suspender las clases en las escuelas de tres departamentos, Escuintla, Sacatepéquez y Guatemala.

Además, las autoridades recomendaron evitar hacer ejercicio al aire libre y salir de casa, y pidieron mantener las puertas y ventadas cerradas, y utilizar tapabocas debido a la contaminación del aire que alcanzó niveles perjudiciales para la salud.

El ministro de Salud, Oscar Cordón, precisó que por la contaminación se han atendido a 205 personas en hospitales.

«También es importante remarcar el daño que los incendios causan a la biodiversidad del país», lamentó el presidente.

Arévalo explicó que el estado de calamidad también permite al gobierno «hacer un llamamiento para recibir la colaboración internacional de aeronaves» para apagar más rápido los incendios.

Los incendios forestales consumen cada año miles de hectáreas en Guatemala. La temporada de mayor incidencia va de noviembre a junio por la ausencia de lluvias.

La mayoría de los incendios son provocados por actividades humanas como la preparación del suelo para siembras, según las autoridades.

 

AFP