La reunión convocada entre el presidente Luis Abinader y los expresidentes Leonel Fernández, Hipólito Mejía y Danilo Medina en el Ministerio de Defensa representa un momento inédito en la historia política de la República Dominicana. Por primera vez, los principales líderes del país se congregan para abordar de manera conjunta una problemática nacional, en este caso, la crisis en Haití. Este encuentro, más allá de su carácter simbólico, debe ser el punto de partida para establecer un espacio permanente de diálogo y acción conjunta en defensa de los intereses supremos de la nación.

La sociedad dominicana observa con atención y esperanza esta iniciativa, esperando que marque el inicio de una nueva etapa en la política nacional, donde las diferencias partidarias se subordinen al bienestar colectivo. Es imperativo que este foro no se limite a una respuesta coyuntural ante la situación haitiana, sino que se convierta en una tribuna permanente para discutir y buscar soluciones a los problemas estructurales que afectan al país, como la educación, la seguridad, la salud y la economía.

El pueblo dominicano demanda un liderazgo comprometido con la defensa de la soberanía, la libertad y la independencia nacional. Es momento de que los líderes políticos asuman con responsabilidad y patriotismo el compromiso de trabajar unidos por el futuro de la República Dominicana, dejando de lado los intereses particulares y enfocándose en el bienestar de todos los ciudadanos. Solo así podremos construir una nación más justa, segura y próspera para las generaciones presentes y futuras.