Los bonos de la República Dominicana retrocedieron después de que el presidente Luis Abinader retirara un proyecto de ley que buscaba aumentar la recaudación tributaria, lo que disminuyó las expectativas de que el país obtenga el grado de inversión.

Los bonos en dólares lideraron las pérdidas en los mercados emergentes el lunes, con los que vencen en 2060 cayendo hasta 2,6 centavos de dólar, negociándose por debajo de los 90 centavos, según los precios indicativos recopilados por Bloomberg.

Abinader mencionó el sábado que retiró su propuesta de reforma fiscal tras reconocer que no contaba con el respaldo suficiente en el Congreso, según una declaración en la página oficial de la presidencia.

La medida se consideraba clave para mejorar uno de los niveles de recaudación tributaria más bajos de América Latina y enfrentar el creciente peso de la deuda. Abinader planeaba utilizar la mayoría de su partido en el Congreso para aprobar la propuesta, pero su introducción generó una fuerte reacción, incluidas jornadas de protestas y el rechazo de los principales gremios empresariales, entre ellos la asociación de turismo, que representa uno de los principales sectores económicos del país.

«La retirada representa un revés significativo para su meta de lograr el grado de inversión para la República Dominicana durante su mandato», escribió Ricardo Penfold, director general de Seaport Global en Nueva York, en una nota dirigida a clientes. «Aún no está claro cómo se logrará la consolidación fiscal, a pesar de la norma que limita el crecimiento del gasto público real».

Tanto Fitch Ratings como Moody’s califican a la República Dominicana tres niveles por debajo del grado de inversión, mientras que S&P Global Ratings la sitúa un escalón por encima, en BB.

Medidas fiscales
La reforma fiscal tenía como objetivo aumentar los ingresos en un 1,5% del producto interno bruto mediante el incremento de los impuestos sobre la renta, las empresas y la propiedad, entre otros. También contemplaba reducir los incentivos otorgados a las industrias cinematográfica y turística.

El proyecto de “modernización fiscal” era una de las principales promesas de campaña de Abinader, quien fue reelegido por amplio margen en mayo, y aseguró que la tan postergada revisión era crucial para impulsar el gasto público y reducir el déficit.

En un discurso televisado el sábado, Abinader señaló que el país necesita las reformas, pero que reconsideraría la propuesta.

«Un gobierno verdaderamente democrático no teme modificar sus decisiones cuando ha escuchado al pueblo», expresó. «Soy un presidente que escucha. No estoy desconectado, no vivo en una burbuja».