Hoy, al conmemorarse el 119 aniversario del natalicio del Dr. Joaquín Balaguer, la República Dominicana recuerda a uno de los líderes más influyentes y determinantes del siglo XX. Su vida política, marcada por más de seis décadas de presencia activa, dejó una huella profunda en el desarrollo institucional, social y económico del país. Fue un estadista que combinó la palabra culta con la acción concreta, el pensamiento conservador con la construcción de una nación moderna y funcional.

Balaguer supo interpretar el alma dominicana y canalizarla en grandes obras de infraestructura, expansión del Estado, desarrollo del campo y estabilidad política. Su estilo firme, muchas veces polémico, no puede opacar su contribución al orden institucional y su constante apuesta por el progreso nacional. Fue también defensor del medio ambiente antes de que el tema ganara protagonismo mundial, y su visión urbanística sigue impactando generaciones.

Hoy más que nunca, en medio de una sociedad marcada por el ruido, la improvisación y la distracción, el legado del Dr. Joaquín Balaguer debe inspirarnos a recuperar el sentido de nación, la disciplina social y el compromiso con la patria. Que este aniversario no sea solo conmemorativo, sino una oportunidad de reflexión nacional sobre la importancia de líderes que piensan más allá del presente y actúan con visión, responsabilidad y amor profundo por su país.