Los reguladores de la Unión Europea multaron el viernes a la plataforma de redes sociales X de Elon Musk con 120 millones de euros (140 millones de dólares) por infracciones de las regulaciones digitales del bloque que, según dijeron, podrían dejar a los usuarios expuestos a estafas y manipulaciones.

La Comisión Europea emitió su decisión tras una investigación que abrió hace dos años sobre X en virtud de la Ley de Servicios Digitales del bloque de 27 países. También conocida como DSA, se trata de un reglamento de amplio alcance que exige a las plataformas asumir una mayor responsabilidad en la protección de los usuarios europeos y en la limpieza de contenido y productos dañinos o ilegales en sus sitios web, bajo amenaza de cuantiosas multas.

La decisión podría preocupar al presidente Donald Trump, cuya administración ha criticado las regulaciones digitales de Bruselas y afirmó que respondería si las empresas tecnológicas estadounidenses son penalizadas.

La compañía no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios enviada por correo electrónico.

Los reguladores dijeron que las marcas de verificación azules de X infringían las reglas debido a su “diseño engañoso” que podría exponer a los usuarios a estafas y manipulaciones.

X también incumplió los requisitos de transparencia para su base de datos de anuncios, dijeron los reguladores.

Las plataformas de la UE deben proporcionar una base de datos de todos los anuncios digitales que han publicado, con detalles como quién los pagó y el público objetivo, para ayudar a los investigadores a detectar estafas, anuncios falsos y campañas de influencia coordinadas. Sin embargo, la base de datos de X, según la Comisión, se ve perjudicada por características de diseño y barreras de acceso como retrasos excesivos en el procesamiento.

Los reguladores también dijeron que X pone “barreras innecesarias” para los investigadores que intentan acceder a los datos.

“Engañar a los usuarios con marcas de verificación azules, ocultar información en anuncios y excluir a los investigadores no tienen cabida en línea en la UE. La DSA protege a los usuarios”, declaró Henna Virkunnen, vicepresidenta ejecutiva de la UE para la soberanía tecnológica, la seguridad y la democracia, en una declaración preparada.