El triple filtro de Sócratesverdad, bondad y utilidad— ofrece una guía esencial para comunicarnos con sentido. Antes de hablar, debemos preguntarnos: ¿es verdad lo que diré?, ¿es bueno para quien lo escucha?, ¿es útil? El filtro de la verdad nos empuja a verificar los hechos, evitando rumores y desinformación que dañan la confianza. En un mundo donde las palabras pueden dividir o unir, este principio nos invita a ser responsables y precisos.

Por su parte, los filtros de bondad y utilidad nos piden considerar el impacto y el valor de nuestras palabras. Hablar con bondad implica empatía, buscando construir en lugar de herir, mientras que la utilidad asegura que lo compartido aporte algo positivo, ya sea inspiración o soluciones. Aplicar estos filtros no solo mejora nuestras interacciones, sino que fomenta una comunicación consciente que fortalece relaciones y enriquece el diálogo colectivo.