Al regresar a Haití este martes 15 de octubre de 2024, el primer ministro de Haití, Garry Conille se reunió con miembros del Consejo Presidencial de Transición (CPT). En esta reunión sólo había un tema: la destitución de la Ministro de Asuntos Exteriores y de Asuntos Religiosos, Dominique Dupuy.

Este expediente, llevado por la presidenta del CPT, Leslie Voltaire, plantea muchas preguntas, en particular sobre las verdaderas motivaciones de este enfoque.

Según la información, en esta decisión influyó la República Dominicana, descontenta con la gestión del ministro Dupuy de la crisis vinculada a la deportación masiva de haitianos. De hecho, la ministro destacó por una campaña internacional que denuncia estas deportaciones. Por tanto, las críticas contra ella parecen estar más vinculadas a sus acciones a favor de los derechos de los haitianos que a razones administrativas o éticas. El silencio del CPT ante esta crisis migratoria plantea dudas sobre las verdaderas intenciones de sus miembros.

La mayoría de los presidentes de los consejos, seis de nueve, pidieron la dimisión de la ministro. Entre ellos se encuentran personalidades ya salpicadas por escándalos de corrupción en el Banque Nationale de Crédit (BNC), como Louis-Gérald Gilles, Smith Augustin y Emmanuel Vertilus. Esta situación cuestiona la legitimidad de sus demandas, especialmente porque no se ha proporcionado ninguna justificación concreta que respalde su solicitud.

Además de estos tres asesores, Leslie Voltaire, Fritz Jean y Régine Abraham también exigieron la destitución de la ministro Dupuy. Cabe señalar que dos de los nueve presidentes del consejo, Edgar Leblanc y Laurent Saint-Cyr, estuvieron ausentes durante esta reunión.

Sin embargo, el primer ministro Garry Conille se opuso firmemente a esta maniobra, afirmando que no existe ningún motivo válido para destituir a la ministro. Al apoyar a Dupuy, el jefe de Gobierno parece querer subrayar la importancia de la transparencia en el proceso de toma de decisiones y proteger a un ministro popular, según él erróneamente acusado.